«Familias y docentes son los dos pilares que equilibran el crecimiento y la educación de los niños»

Diego Tellez, Maestro de Educación Primaria hablará el 25 de mayo en Alicante sobre un proyecto de Gestionando Hijos y Fundacion SM

Redacción 28.04.2019 | 04:15

«Somos un equipo. Un padre criticando a un profesor es tan absurdo como el aficionado que silba a su propio portero» decía siempre que se le preguntaba sobre su relación con los profesores el gran Carles Capdevila. Y de esta idea surgió El mejor colegio del mundo, un proyecto de Gestionando hijos y Fundación SM que busca propiciar la buena relación entre madres, padres y docentes como garantía del éxito educativo.

De este tema se hablará en el evento del mismo nombre que se celebrará el próximo 25 de mayo en el Auditorio de la Diputación de Alicante (ADDA). El encargado de hacerlo será Diego Tellez, Maestro de Educación Primaria y especialista en innovación educativa.

– Muchas ocasiones existe una relación tirante entre docentes y padres. ¿Tú también tienes esa impresión?

De entrada, no creo que esto sea realmente un problema generalizado. Depende de muchos factores y no debemos crear una alarma social donde no la hay. Obviamente, los docentes tenemos innumerables encuentros con familias de características muy diversas, y es relativamente normal que surjan desencuentros de vez en cuando. Al final, el alumno es nuestra prioridad y deberíamos ser capaces de crear relaciones de confianza y respeto, de las que seguro se van a beneficiar los niños y jóvenes que llenan nuestras aulas.

La tirantez suele surgir cuando no existe una comunicación suficiente como para que todos podamos acompañar con éxito el desarrollo integral del alumno. Cada cual en su rol, familias y docentes son dos pilares fundamentales que equilibran el crecimiento y la educación de los niños. Si alguno falla o se crean grietas, ese equilibrio se resiente y termina repercutiendo en el alumno.

– ¿Hasta qué punto puede perjudicar esta mala relación a los alumnos?

Sin duda, les perjudica. Los niños no son ajenos a lo que ocurre entre los adultos. Al contrario, son especialmente sensibles a los enfrentamientos y discusiones que surgen entre nosotros, especialmente si ellos son el centro de nuestras diferencias.

Al igual que con las familias u otros seres queridos, los niños establecen vínculos de apego con sus maestros. Cuando estos vínculos se ven dañados, repercute en la seguridad y la gestión emocional de los pequeños. Todo este proceso, inevitablemente, influye en su aprendizaje.

– ¿Nos olvidamos los adultos de las necesidades de los niños en todo, y también en la educación?

Me preocupa observar que muchas veces seguimos interpretando la infancia desde los parámetros del adulto, organizándoles «jornadas de trabajo» diario tan extensas como las nuestras. El estrés y la ansiedad están cada vez más presentes en niños y jóvenes. Por lo tanto, es de vital importancia que respetemos las diferentes etapas del desarrollo de los niños.

Por ejemplo, en la etapa de 0 a 6 años, es crucial que los niños exploren, se conozcan, aprendan a relacionarse con los demás y con el entorno, y se les ayude a ganar en independencia y autoestima. Al final de esta etapa, se le ha otorgado mucha importancia a la adquisición del proceso lectoescritor, cuando está demostrado que es necesaria una cierta madurez neurológica para poder afrontar este reto con suficientes garantías.

Por suerte, he conocido (y aprendido de) muchísimas maestras respetuosas con los ritmos de los pequeños, que les ayudan en la adquisición de destrezas psicomotrices y en el desarrollo de la conciencia fonológica. Forzar es un grave error; en cambio, fomentar, estimular y acompañar son clave para poder ir introduciendo, poco a poco, aprendizajes más complejos en función del desarrollo individual de cada niño.

– Como profesor… ¿Cuál sería para ti la fórmula que garantizaría una mejor relación entre madres, padres y docentes?

No soy muy de dar «recetas mágicas»€ En cambio, leer, investigar y aprender de los demás me proporciona cierta tranquilidad a la hora de tomar y justificar mis decisiones.

Puede parecer un tópico, pero lo cierto es que cada centro tiene un entorno y un contexto determinado, del mismo modo que los valores y las creencias de las familias en un mismo centro pueden ser diversas. Creo que el camino correcto debe ir por conocer la realidad de los alumnos y las familias con las que trabajamos, para poder ir creando lazos que desemboquen en una verdadera comunidad educativa.

Personalmente, desde la profesionalidad que se nos presupone, suelo huir de posicionamientos absolutos y busco establecer relaciones que se sustenten en la confianza y el respeto. Trato de hablar con franqueza en base a mi experiencia y a razonamientos pedagógicos, estableciendo planes de actuación en los que el beneficiado siempre sea el alumno.

El mejor colegio del mundo busca propiciar la buena relación entre madres, padres y docentes.

– ¿Hasta qué punto esta mala relación se debe a la perdida de prestigio que ha sufrido la profesión de maestro?

No me gusta buscar culpables, creo que es un ejercicio inútil en tanto en cuanto se centra en el problema y no en buscar soluciones. Es evidente que, a pesar de lo que digan nuestros representantes políticos, la Educación no es una de sus prioridades. Como muestra, me decepcionó profundamente comprobar que en el primer debate electoral a penas se dedicasen 50 segundos a hablar del tema, ¡entre los cuatro candidatos! Por desgracia, es evidente que esta falta real de interés es permeable a todos los estratos de la sociedad.

Por otro lado, y con sinceridad, no considero que las situaciones de mala relación se produzcan por un desprestigio de la profesión de maestro. Como decía anteriormente, estamos hablando de relaciones personales-profesionales, por lo que es necesario analizar cada caso en su contexto y ver qué está en nuestra mano para mejorarlo.

– La confianza, la base de cualquier relación. ¿Crees que no existe esa confianza entre madres, padres y docentes?

Sin duda, junto al respeto, la confianza es la base. Porque así lo he experimentado y comprobado, existen muchos casos en los que la confianza, y por extensión la relación entre familias y docentes, es buena.

Sin embargo, si aceptásemos como premisa que no hay una buena relación familia-escuela, creo que es muy importante considerar el factor «tiempo». Por un lado, es necesaria una conciliación real si queremos que las familias se involucren de verdad en la comunidad educativa. Por otro, es fundamental que se bajen las ratios y se racionalicen los horarios para que los docentes puedan investigar y dedicar mucho más tiempo a atender a todos esos padres y madres con los que trabajar conjuntamente. ¿Qué tipo de relación se puede establecer con dos o tres tutorías al año de unos treinta minutos cada una?

– Los famosos grupos de Whatsapp de padres donde se critica a profesores ¿Fomentan ese desencuentro? ¿Deberían desaparecer?

Los grupos de Whatsapp no me gustan. ¿Deberían desaparecer? ¿Prohibirlos? Tampoco tiene mucho sentido puesto que está plenamente instaurado en diversos ámbitos de nuestro día a día.

Del mismo modo, en la actualidad existen muchísimos medios con los que los centros educativos y los docentes pueden abrir canales de comunicación con las familias. Cuanto más fluida y constante se esa comunicación, menos necesidad tendrán los padres de tratar de conseguir información por otros canales que no sean tan directos.


https://www.diarioinformacion.com/crecer-y-aprender/2019/04/28/familias-docentes-son-pilares-equilibran/2143179.html

I les famílies, com les acompanyem en la tasca d’educar? Però, per què a la pràctica és una tasca complexa, encara?


Un dels aspectes més rellevants en l’èxit escolar és la relació positiva entre les famílies i les escoles. En aquest sentit, acompanyar les famílies en la tasca educativa passa, en bona mesura, per conèixer els seus neguits i les pors, facilitar la coherència entre el relat que l’infant viu a l’escola i a casa i, en definitiva, canviar la mirada per entendre que tots sumem, fem equip.

Sílvia Blanch

Mai com fins ara hi ha hagut un acord més unànime de la importància de l’acompanyament a l’escolaritat de les famílies i per tant, la necessitat de col·laboració entre la família i els centres educatius. Però, per què a la pràctica és una tasca complexa, encara?

Una de les barreres més difícils de salvar són les nostres pròpies creences, és a dir, aquelles idees que tenim de l’altra, de la seva funció i actitud. Aquestes idees generen unes expectatives que d’alguna manera ens delaten quan actuem. Per exemple, si una mestra li diu a un company: “Ja està bé que la família del Biel no em faci cas, jo sé el que els convé” ; denota unes creences d’expertesa, de superioritat, de relació desigual. A més a més, mostra expectatives poc acurades al esperar que facin el que ella dia, i no pot entendre com no acceptin la seva ajuda (que segurament no han demanat).

Per contra, si davant de la mateixa situació la mestra diu al company: “Veig que el Biel pateix perquè està molt sol, des de l’escola podem reunir-nos i veure què hi podem fer…” i a més a més, també parla amb la família i els diu: “Parlem del Biel, a l’escola veig que està molta estona sol i se’l veu trist, què podem fer perquè el Biel pugui sentir-se millor? Què se us acut? Potser podríem….”, aquesta mestra denota una concepció més col·laborativa, on el saber és compartit, cadascú coneix el Biel d’una manera i en un context, posant a la famílies al davant, ja que té molt més coneixent dels propi fill.

Fa uns dies, una antiga alumna m’explicava que va començar la seva primera feina a final de curs, fent una substitució a l’estança de 2-3 anys. La primera setmana, sola, amb uns 20 infants, oblida treure el bolquer d’un nen desprès de la migdiada (n’hi ha que el porten tota l’estona i d’altres només per dormir). La mare de l’infant en qüestió, via agenda, li escriu “estaria molt bé que el meu fill sortís sense bolquer, no com divendres”. En aquest cas, la mare està disgustada amb la situació de baixa de la mestra titular i desconfia de la capacitat de la mestra nova. La desconfiança que li genera la situació crea una resposta que en comptes d’ajudar, crea tensió i més distància entre totes dues. I em pregunto, com s’ha fet el traspàs? Con s’ha acompanyat a la mestra nova i a les famílies?

Si la recerca exposa que un dels aspectes més rellevants en l’èxit escolar és la comunicació en relació a l’escola en el context familiar, com podem fomentar que les famílies coneguin l’escola, a les mestres, què s’hi fa, amb qui i com, per poder-ne parlar a casa? Com podem facilitar que cada infant pugui fer una narrativa de la seva història que sigui coherent amb el que hi ha a casa i a l’escola?

Penso que l’acompanyament comença des del primer dia en que una família visita l’escola: quina impressió té de l’edifici, amb quina actitud la reben, quina informació i proximitat hi ha, com són les altres famílies…aquestes trobades inicials generen una primera impressió i unes expectatives que costarà canviar.

D’altra banda, per poder col·laborar és imprescindible interessar-se per l’altra i  conèixer més sobre ella, però això només passa si tinc moments compartits. En aquest sentit, aspectes organitzatius com les entrades i sortides “lentes”, és a dir, aquelles que deixen un marge ampli per arribar i iniciar el dia a l’escola. En aquest cas, el fet d’entrar a l’escola  i  estar una estona amb els infants faciliten 3 aspectes bàsics:

  1. Coneixença. Del propi fill, dels seus companys, de la mestra, dels espais, de les propostes…
  2. Vincles. Al ser-hi hi ha la oportunitat de mirar-se amb altres, de comentar, de trobar punts en comú, de sentir-se part d’una comunitat.
  3. Confiança. La coneixença, la impotència de l’infant i els vincles que es van forjant, possibiliten complicitats que generen confiança.

Una altra oportunitat són les trobades d’inici de curs, on es presenta un moment ideal per conèixer-nos, per saber què esperen les famílies i per compartir unes trobades participatives on es creïn més complicitats. Aquestes trobades haurien de repetir-se en altres moments del curs, de manera grupal i individual.

Així, doncs, què podem fer per acompanyar  a les famílies en l’educació?  creure que tots sumem, fer equip, obrir portes de forma planificada, consensuada i amb sentit, por conèixer-nos i oferir un context on les famílies poden tenir altres models, compartir neguits i fer xarxa amb les altres famílies.

Però el més important som nosaltres, la nostra actitud i fer un treball intern per poder analitzar els neguits, les pors i exposar les creences per canviar la mirada  de manera autèntica, erradicant frases tòxiques de l’estil “com cada dilluns ja venen espatllats de casa”. Treballar en equip és com un puzle, entendre que cada un de nosaltres té una peça clau i un lloc, així,  junts fem possible anar més enllà en benefici dels infants, tenint en compte que la organització de la jugada i el primer moviment, toca fer-ho des de l’escola.

[ Sílvia Blanch va intervenir al XXIXè Fòrum Local d’Educació “El treball amb les famílies des del món local” el passat 26 de novembre.  Aquí podeu trobar-ne més informació]

Famílies i escola: un repte educatiu compartit de tota la comunitat

L’escola i la família són dos grans blocs d’aprenentatge que hem d’entendre com a àmbits complementaris perquè la transferència d’un context a l’altre dona solidesa a tots els aprenentatges. Per això mateix, cal impulsar la cooperació entre l’escola i la família, perquè d’aquesta manera afavorirem tots els aprenentatges.

Moltes són les demandes que es fan, en aquests moments i de manera recorrent, a la participació de les famílies en el procés educatiu de les criatures. Això no vol dir i no hauria d’interpretar-se que no se’n cuiden ni eduquen de forma apropiada. Aquesta demanda de major participació no es centra en el què realment fan cada dia i a tota hora sinó en la seva implicació amb el centre educatiu que, tampoc, no vol dir que no valorin les accions que es fan en els centres. Per això és important aclarir alguns termes i mirar què és el que seria apropiat per tal de no afegir tensions, sentiments de culta, estereotips i perjudicis.

Aquesta demanda, sovint, respon al desig de millorar els processos d’aprenentatge de l’alumnat i es busquen tots els agents implicats per tal d’enfortir les relacions que, sens dubte, poden millorar aquests processos. Però, sempre hi ha alguns matisos que massa vegades queden camuflats o que fan invisibles aspectes que, fins i tot, poden ser més importants que el que estem defensant i promovent.

Una primera consideració seria distingir, malgrat l’estreta vinculació i interacció que hi ha entre educació i aprenentatge, que també caldria considerar els diferents contextos en els que es donen (famílies, escola, entorn, activitats múltiples) i el seu valor. L’educació és un procés de llarg recorregut i guiat perquè totes les persones, especialment la població infantil, adolescent i jove, pugi seguir un procés de maduresa, socialització i creixement.

Recuperem  el tema dels aprenentatges per tal de posar llum als diferents contextos en que cal aprendre i les responsabilitats especifiques de les persones adultes de cada context sense una mirada  on es posi a l’escola en el centre en lloc de les persones i de forma especial els infantis, adolescents i joves.

A l’escola cal, lògicament, el guiatge professional per seguir els processos específics i els múltiples aprenentatges: conceptuals, raonaments i informacions de manera que pugin ser significatives en el marc individual i de grup.  Cal valorar la complexitat de l’escola inclusiva i diversa considerant les individualitats amb tota les seves riqueses no sols perquè hi ha criatures amb necessitats especifiques sinó pel fet que no hi ha cap criatura igual, que hi ha diversos ritmes de maduresa i per tant cal pensar en el 100% de l’alumnat.

A la família es dóna l’altre gran bloc d’aprenentatges. Aquells que, sovint minimitzat,  estan vinculats a la vida quotidiana, tant en el context domèstic, que en molts casos tenen prou complexitat (organització del temps, cura de les persones, economia, compra, tasques, materials, responsabilitats, cooperació…),  com els que estan implicats en totes les gestions,  responsabilitats i necessitats  de cada un dels seus membres: infants, gent gran, que cal fer durant tota la vida i que cal aprendre per poder ser membres actius de la societat, participar, col·laborar  i assumir els reptes i no sols esperar que algú ja ho resoldrà.

No son pas contradictoris aquests dos grans blocs sinó, ben al contrari, són complementaris ja que la transferència d’un context a l’altre és el que dona fortalesa i significativitat a tots  aprenentatges i en mostra la necessitat. L’oportunitat i, a la vegada, la complexitat. Però està clar que cal, per afavorir tots aquests aprenentatges, la cooperació entre l’escola i la família i que és  facin tots aquests aprenentatges a cada context. No cal que l’escola assumeixi els que són pròpiament del context familiar i segurament ens cal revisar que, tampoc,  les persones adultes de la família hagin de fer els aprenentatges escolars.

A casa hi ha  competències i recursos per resoldre i ensenyar a aprendre tot el que es necessita perquè ja fa molts anys que ho realitzen i malgrat augmenti la complexitat ho aniran fent i educaran a les seves criatures simultàniament  malgrat els horaris laborals i els possibles models educatius.

Evidentment l’educació és un repte compartit per tota la comunitat: les famílies, l’escola, les activitats fora escola, pediatria, treball social, cultural, esports i totes les agències que tenen relació amb les persones  i de manera especial amb la població més jove. Està clar que cal incloure-hi el teixit social, des de les polítiques que cal fer, les decisions econòmiques per dotar de recursos i el teixit empresarial per tal d’oferir oportunitats laborals dignes. Estem parlant com la societat s’implica en la millora del seu futur a través de l’educació focalitzant-la en el col·lectiu jove.

Aquest és el gran valor dels Espais de Debat Educatiu en que es posa la mirada i el reconeixement de totes les persones, es recupera el saber de tothom en relació a l’Educació i es poden compartir idees, reflexions, coneixements des de l’equitat i la igualtat i no des de l’expertesa que dóna lliçons. És molt ben rebut  per les famílies i per a totes les persones  el missatge educatiu (no escolar) per entendre el desenvolupament de les criatures a nivell cognitiu, socialització, sensibilitats, llenguatges diversos, perquè com a comunitat tothom educa i també ensenya.   Ben segur que hi ha, a més, molt interès de les famílies per compartir idees si hi ha reconeixement i respecte que es podrà donar de forma reciproca sempre que no s’ignorin les condicions laborals i familiars que determinen moltes actuacions.

Aquest és el repte en considerar que l’èxit escolar es fonamenta en l’educació i maduresa  i la responsabilitat especifica ha de ser, progressivament,  de la criatura perquè tant l’escola com  la família afavoreixen que hi hagi implicació valorant, motivant als seus fills i filles perquè responguin adequadament als requeriments del professorat. També cal que l’escola respecti els horaris famílies i el fet que la criatura no és sols escolar (6 hores al dia) sinó persona (18 hores al dia) i cal valorar la complexitat de la vida familiar (persones, necessitats domèstiques, laborals, etc..) per no jutjar, exigir  la seva implicació interpretant la seva menor resposta presencial com a manca de motivació o de  responsabilitat educativa. Cal evitar la  mirada classista i etnocèntrica que no que faciliti que les famílies es sentin jutjades o menystingudes per la seva diferent participació a algunes activitats que es realitzin.

L’èxit educatiu sols es pot donar en el marc del sentiment de pertinença  de tots plegats que afavorirà la millor relació fet que no vol dir ocupar tothom el mateix lloc però si tenir el reconeixement, respecte i valoració per part de tota la comunitat.

[ Maria Jesús Comellas intervindrà al XXIXè Fòrum Local d’Educació “El treball amb les famílies des del món local” que es durà a terme el proper 26 de novembre.  Aquí podeu trobar més informació i la butlleta d’inscripció. ]

Educación garantiza extraescolares mientras [las familias] las ven peligrar

Conselleria dice que asumiría el coste si las escuelas justifican que no pueden pagar. La federación de familias advierte que muchos centros se niegan a financiarlas

ESTEFANIA MOLINER
17/07/2018

La Conselleria de Educación asumirá el coste de las actividades extraescolares de los alumnos con becas de comedor (o en una situación económica similar) en los casos extraordinarios en los que los centros aleguen que no pueden hacer frente al pago. Este deberá realizarse a partir de septiembre a través de la partida de gastos de funcionamiento de cada escuela, en base a la normativa que entrará en vigor el próximo curso y que establece que las actividades extraescolares que se lleven a cabo hasta las 17.00 horas han de ser gratuitas para el alumnado con beca de comedor y debe ser el propio centro el que las financie a todos los becados.

RESPUESTA // Así lo explican fuentes oficiales de la Conselleria después de que desde la federación de asociaciones de madres y padres de alumnos Fampa Castelló-Penyagolosa advirtieran que habían tenido conocimiento de que «las direcciones de algunos centros se niegan a financiar las extraescolares para becados», denunciando «las trabas» que supone la nueva normativa para el desarrollo de las actividades.

Ante esta situación, desde Fampa Castelló-Penyagolosa ven «peligrar» la subsistencia tanto de la oferta como de las AMPA, «pues una de las principales demandas de las familias a las asociaciones son las extraescolares y, si no pueden ofertarlas porque no van a contar con la financiación preceptiva de los centros, muchos padres perderán el interés en asociarse», resalta la presidenta de la federación, Silvia Centelles.

Un extremo que no comparten fuentes de la Conselleria de Educación, que explican que precisamente la nueva normativa «da mayor autonomía y participación a las AMPA, ya que estas están representadas en los consejos escolares, que son los que deciden la oferta de actividades».

DEMANDA DE UN ESTUDIO // Por otra parte, desde la federación de asociaciones de padres y madres reclaman a Educación un estudio para conocer la demanda real de actividades antes de poner en marcha la nueva normativa e instan a las AMPA a que presenten el programa de extraescolares ante los consejos escolares. Para ello, explican que deberían solicitarlo a lo largo de julio para que se convoquen en septiembre.

http://www.elperiodicomediterraneo.com/noticias/castellon/educacion-garantiza-extraescolares-mientras-padres-ven-peligrar_1159860.html

AMPA Pare Jofré: La Volta al Món en 80 dies interpretada per mares i pares del CEIP Pare Jofré

Imatge

Com participar en el AMPA? TEATRE per exemple etc… Mireu, entre mares i pares, mestre i ex alumnes, aquí estan.. Charo Romero, Amalia Quiroga, Bea Barres, Laly Mengual, María Gil, Abel Guinart Álvarez, Mariana Galvagno, Cecilia Zarzo, Soledad Chulvi, Dolors Martínez, Toñi Palomar, Eva Sánchez, Maria Llavador, Vivianne Adenauer, Marise Fonseca, Roberto Tarrazona, Sonia Díaz i Rafa Cano.

I els i les alumnes són: Alejandra Pirles Gil, Cecilia Luque Zarzo, Lucía Luque Zarzo, Paula Ramírez Romero, Helena Oriola Fonseca, Carlota Vicente Barres, Elena Capilla Chulvi, Laia Sáez Mengual, Georgina Sáez Mengual, Violeta Oliván Quiroga, Berta Rodríguez Palomar, Daniela Tarrazona i Eva Oriola Llavador.

Més informació al https://ampaparejofreblog.wordpress.com/teatre/

LA VOLTA AL MÓN EN 80 DIES

Una llista de 37 raons: així es viu el despertar feminista en un institut de secundària després del 8M

Les alumnes de 4t d’ESO del centre Dominiques de Barcelona han elaborat una llista d’episodis masclistes que després van llegir als seus companys: que hagin estat les seves pròpies amigues les qui han tractat d’obrir-los els ulls, va propiciar un debat sobre gènere que ara s’està propagant per tot l’institut

Existeix un abans i un després de la vaga del 8M per a les alumnes de l’institut Dominiques de l’Ensenyament de Barcelona. I per als alumnes. I pot ser que per a molts professors. La seva és la història del despertar feminista d’un grup de noies que, al voltant d’aquella històrica mobilització, van decidir plantar-se davant els comportaments masclistes que rebien al centre i liderar un procés de transformació que va camí de contagiar tota l’escola.

“Les que van anar a la vaga van venir després a classe molt motivades, i entre totes vam demanar els professors que ens deixessin un espai no mixt perquè les noies poguéssim compartir el que hem sofert durant anys”, relata Paula Ayuso. Va ser una trobada en el qual les 40 alumnes de 4t de l’ESO van posar sobre la taula comentaris, mirades, frecs, paraules, que les feien sentir incòmodes com a dones. “Vam veure que totes parlàvem del mateix, algunes vam plorar d’emoció, vam fer el clic”, relaten.

Van sortir d’allà amb una llista anotada en un paper. 37 episodis masclistes que havien sofert en aules i passadissos de l’institut, però sobretot al carrer, en discoteques o amb les seves parelles. Un mes després, i després de diverses sessions de tutoria i tallers no mixts per donar-les espais de confiança, van presentar la llista davant els nois. Aquella va ser una sessió catàrtica, segons relaten docents i alumnes. “A la meva classe vam estar en silenci molta estona després de llegir-ho”, assenyala Ayuso.

 “Aquella sessió va ser el clic dels nois, que van començar a acceptar errors i predisposar-se al canvi”, resumeix Xavier Badenes, un dels tutors que ha propiciat aquest debat. El destí va voler que aquesta jornada coincidís amb la lectura de la sentència de ‘La Manada’. Un més dels fets d’aquest any 2018 que han contribuït, juntament amb la manifestació del 8M, a que el debat sobre el feminisme o l’assetjament s’hagi colat en molts àmbits socials a Espanya, entre ells les aules dels instituts.

“La vaga ha estat un punt d’inflexió per fer que els alumnes, i també els professors, anem prenent consciència; és una qüestió molt present en les vides dels adolescents, perquè l’institut és el seu primer espai de socialització mixt des que coneixen la sexualització i el desig”, argumenta Badenes.

Mireia Foradada, pedagoga i membre del programa Paranys de l’amor, que durant anys ha fet xerrades sobre violència masclista en instituts, percep un canvi en la “sensibilització” dels joves, però no una “transformació profunda”. “Moltes joves semblen més empoderades, saben què poden tolerar o què no, cada vegada hi ha menys lloc per a expressions masclistes, però cal veure si això acaba consolidant-se i provocant canvis”, planteja aquesta educadora. 

No sortir a la pissarra per por de comentaris

Després de més d’una desena de sessions de tutoria, en les quals han discutit sobretot allò que els angoixa i com canviar-ho, les alumnes de 4t d’aquest institut preparen una sèrie de tallers del mateix tipus per impartir a les seves companyes de 1r i 2n. “Nosaltres no hem tingut ni un any per treballar-ho, tant de bo algú m’hagués ajudat a qüestionar-me si la meva classe era masclista en arribar a l’ESO”, reflexiona Eli Gràcia.

Que algú els hagués avisat que rebutjar un acte tan anodí com sortir a la pissarra per por dels comentaris no és alguna cosa normal. “Jo vaig estar una temporada sense fer-ho per por, i no és perquè sentis comentaris sobre el teu cul, però sí sorolls i rialletes i tots ens entenem. És molt incòmode”, valora Gràcia.

Els 37 episodis concrets que van compartir amb els seus companys no sortiran d’aquesta aula –la seva intenció no és fer-los públics, sinó provocar la reflexió–, però preguntades per això triguen molt poc a trobar altres situacions d’assetjament, encara que sigui de baixa intensitat. “Tenim 16 anys i, siguem sincers, ens toquem molt entre nosaltres, però algunes vegades les noies diem que no volem o no ens ve de gust, i això no impedeix que de cop algú et toqui el cul o se t’acosti”, relata Ayuso.

“Això no és greu, però jo no tinc per què viure-ho”, expressa aquesta alumna. I una de les seves companyes afegeix: “I mira que pel que parlem amb altres amigues de fora, el nostre institut és molt millor en aquest sentit, i la majoria de nois de la nostra classe ho ha rebut molt bé”.

Del seu periple per instituts de tota Barcelona, la pedagoga Foradada identifica sobretot dos principals tipus de discriminació de gènere. La primera, la que té a veure amb les valoracions del físic. “La pressió pot ser brutal, sobretot la gordofòbia, però també el rebuig cap a la que no té molt pit o cap a la que és massa andrògina”, detalla. La segona és l’anomenada ‘estigma de puta’. “La por al fet que em diguin puta per relacionar-me sexualment de forma lliure o per vestir de forma suposadament provocativa”, prossegueix Foradada. I afegeix una tercera, la que ve del professorat. “Moltes vegades és el docent qui li diu a l’alumna que va provocant i que es canviï”, sosté.

En el cas de Dominiques, el treball s’ha centrat en la relació entre nois i noies, però això ha conduït al fet que identifiquin el masclisme també quan ve del centre. “L’altre dia van demanar per megafonia quatre nois forts per moure unes taules, no tornarà a passar”, bromegen les alumnes.

L’impacte en els nois: “Et quedes sense paraules”

Enric Chueca explica que ell sempre s’havia tingut per un jove conscienciat, amb moltes amigues que ja li havien confessat alguns problemes, però això no li va evitar la sorpresa el dia que els van treure la llista. “Ens vam quedar sense respiració; encara que alguna cosa ja me l’esperava em va impactar igual”, relata.

“La majoria de joves no se senten interpel·lats en el seu dia a dia quan es parla de masclisme; canviar això és fonamental”, sosté Gemma Altell, psicòloga en la Fundació Surt. És el que li va passar per exemple a David Gracián, segons explica ell mateix: “Al principi de les sessions no m’ho prenia seriosament, a ningú li agrada que li diguin masclista, i menys si està a favor de la igualtat, però és que les històries ens van impactar tant que vam veure que calia canviar coses”, sosté.

El seu company Chueca pren el seu argument i ho amplia: “Hem ampliat el nostre coneixement, abans hi havia conductes que no sabíem que eren masclistes i ara sí”. “Teníem inculcades coses a nivell micro com tendir a aixecar la veu quan parla una noia com si la teva opinió fos més important”, exposa. Aquest i altres exemples són els que ells també abordaran amb els petits de l’institut.

El treball amb els nois és gairebé més delicat que el de les noies, perquè potser no només han d’aprendre a distingir els tics masclistes i l’assetjament, sinó aplicar-ho al seu dia a dia. “Hi ha diverses fases en ells. Primer, negar que siguin un grup masclista, després minimitzar-ho, i al final començar a comprendre-ho i adoptar una voluntat de canvi”, analitza el tutor, que afegeix que si escau hi ha alumnes en cadascuna d’elles, i sobretot molts casos “esperançadors” que han fet tot el recorregut.

Per a això Badenes creu necessaris exercicis com el que les noies els confrontessin amb les seves 37 raons. “Són les seves companyes de tota la vida, les seves pròpies amigues, les que els ho diuen i comparteixen emocions”, exposa el docent.

La discriminació de gènere en l’era de les xarxes

Una de les assignatures pendents que segons les joves de Dominiques encara no han abordat prou és el masclisme en les relacions de parella. Una enquesta del CIS va encendre totes les alarmes en 2015 en constatar que un de cada tres joves percep com a “acceptables” o “inevitables” conductes com controlar els horaris, amistats o activitats de l’altre.

“L’adolescència es construeix sobre models de l’amor romàntic, de dona submisa, com les pel·lícules de Disney o Crepuscle, encara que això s’aferma sobretot en una etapa més infantil”, desenvolupa Altell. Badenes ho viu en el seu moment a dia a l’aula: “Hem tingut alguns casos greus de relacions de parella en el qual elles estan massa pendents del mòbil per si ell ha vist el whatsapp i no ha contestat, o gelosia en nois pel comportament de la seva parella”.

“La necessitat de control dels nois de vegades és major que abans perquè es troben més descol·locats sobre quin ha de ser el seu rol davant unes noies cada vegada més autònomes”, sosté Altell. Davant això, tant les alumnes de Dominiques com els professionals coincideixen que potser caldria avançar les xerrades i debats sobre relacions a final de Primària o al principi de l’ESO per anticipar futurs problemes. I afegeixen que cal tenir en compte l’ús de les xarxes socials.

“La tecnologia ho amplifica tot, també la capacitat de control”, alerta Altell. Però les xarxes també tenen el seu costat positiu, i no és menor, segons la pedagoga Foradada. “Permet que el missatge feminista arribi via Youtube o Instagram a edats més primerenques que abans”, celebra. “Jo vaig entrar en contacte amb el feminisme de més major, llegint llibres i anant a debats, però ara hi ha vídeos virals sobre el ‘no és no’ o memes rient-se dels tics masclistes pertot arreu”, conclou la pedagoga.

http://diarieducacio.cat/una-llista-de-37-raons-aixi-es-viu-el-despertar-feminista-en-un-institut-de-secundaria-despres-del-8m/?utm_source=Butllet%C3%AD+web&utm_campaign=c3c5da89d1-EMAIL_CAMPAIGN_2016_11_24_COPY_01&utm_medium=email&utm_term=0_1792201920-c3c5da89d1-157767465